Grupo de Mujeres Unión Esperanza: Una Historia de Éxito
El municipio
de Santa Ana Huista, Huehuetenango se queda a unos 320km de la ciudad de
Guatemala y está dividido en cabecera
municipal y 13 aldeas, uno de esas aldeas es Buenos Aires. La aldea Buenos
Aires, es el hogar de un grupo de mujeres que se llama Unión Esperanza. Desde hace más de 10 años, mujeres de Unión Esperanza han manufacturado productos a base de maní, incluyendo maní
salado, tostado, horneado, picante, garapiñado y crema de maní.
Grupo de Mujeres, Unión Esperanza
|
Farmer to Farmer (F2F)
Guatemala conoció la historia detrás del grupo de mujeres Unión Esperanza a
través de la Agencia
de Servicios y Desarrollo Económico y Social de Huehuetenango -ASDECOHUE- la cual es una entidad civil de segundo grado
sin fines de lucro integrada por cooperativas, asociaciones, comités de
desarrollo y grupos de mujeres, entre ellos Unión Esperanza. ASDECOHUE está
dedicada a brindar asistencia técnica para poder
lograr un desarrollo rural empresarial. Sin embargo, ASDECOHUE no cuenta con recursos suficientes para dar
atención a capacitaciones en administración empresarial, ni de transferencia de
tecnología para mejorar los procesos productivos y de manufactura, dos temas de
alta necesidad e importancia a Unión Esperanza. Fue aquí, en donde F2F
Guatemala entró al juego.
En mayo 2015, F2F logró
contactar a La Dra. Sindy
Chapa, quien obtuvo su PhD. en Mercadeo y Negocios Internacional
y tiene experiencia en estrategias publicitarias dirigidas a las
comunidades latinas en los EE.UU. Durante más de dos meses La Dra. Chapa se
mantuvo comunicación directa con el grupo de mujeres, analizando las fortalezas
y debilidades del grupo. Desafortunadamente, La Dra. Sindy Chapa no estaba
dispuesta para viajar a Guatemala para trabajar directamente con el grupo de
mujeres. Pero, ella enseñaba una clase de maestría en administración de
negocios y elaboró una competición en su clase para desarrollar el mejor plan de negocios,
estrategia de mercadeo y venta y logo para Unión Esperanza. Cada equipo de dos
estudiantes desarrollaron un logo para los productos a base de maní. Se
llevaron a cabo grupos focales, tanto en Guatemala como en los Estados Unidos y
se compartió la experiencia a través de video conferencias.
Nueva presentación de logotipo, Santa Ana Huista
|
Finalmente,
los equipos de estudiantes presentaron sus productos finales, y el Unión Esperanza escogió el
diseño ganador. El equipo de estudiantes que ganó la competición tuvo la
oportunidad de viajar a Guatemala como voluntarios de F2F para aplicar en campo el plan de
negocios. Los ganadores fueron las estudiantes, Katie Plaia y Jennifer Rangel.
Jennifer
y Katie viajaron a Guatemala en julio 2015 y fortalecieron
las capacidades de las mujeres en los temas de mercadeo, comercialización,
rediseño del logotipo, estrategias de venta, mejoramiento de imagen,
importancia de la tabla nutricional en los productos alimenticios y análisis de
costos de producción. Como resultado de las capacitaciones impartidas se
observó mejor aceptación de los productos en el mercado, aumento en las ventas,
nuevos enlaces comerciales y fue una gran fuente de motivación para el grupo de
mujeres quienes comprendieron la importancia de sentirse empoderadas por sus
propios méritos, tener su propia micro empresa con un producto valioso.
Voluntaria de F2F Dianne Tweete
capacitando al grupo en la
elaboración de mantequilla de maní |
El
siguiente paso fue capacitar a las mujeres y a los productores de manía en
temas de Buenas Prácticas de Manufactura- BPM- y Buenas Prácticas Agrícolas-
BPA- . En septiembre 2015, la voluntaria
de F2F Dianne Tweete aceptó el reto de cumplir con esta asignación. Dentro de los temas de capacitación que se llevaron a cabo están:
requisitos para manipular alimentos, manipulación de manía en la cadena de
alimentos, requisitos de infraestructura y programa de somatización y
formulación de nuevos productos a base de manía. Gracias al trabajo de Dianne, se
logró el diagnóstico de manufactura y control de calidad de los productos.
Además, se generó interés de otras organizaciones de ASDECOHUE en mejorar el
cumplimento de las BPM. En
diciembre 2015, Unión Esperanza se invitó a representantes de otros grupos
afiliados a ASDECOHUE y repitieron las capacitaciones sobre lo que habían aprendido.
Esa capacitación aumentaba el autoestima de las mujeres y generaba un mayor
impacto para la región.
Iveth Tomás, la
coordinadora del Centro de Servicios Empresariales de las Mujeres de ASDECOHUE,
dijo, “He podido
observar y ser partícipe del entusiasmo que muestran las integrantes del grupo de mujeres Unión Esperanza, desde que
han recibido voluntarias de F2F. Es bonito ver el antes y después de la
intervención de F2F. Los productos son otros, el módulo de producción ha
mejorado y esto hace que las mujeres vendan más y así obtienen ingresos, lo
cual les ayuda a comer mejor, llevar a sus hijos al doctor y que los niños
sigan estudiando mientras las mamás trabajan en el procesamiento de maní.” –
Iveth Tomás
Comments
Post a Comment